Comedia vulgar sobre una profesora que pretende emular a su padre entrenando un equipo de fútbol americano, que no de rugby como equivocadamente califican el juego en su versión doblada al castellano.
Tema muy manido el de el entrenador que coge un equipo para sacarlo de la vulgaridad y el ostracismo. La diferencia aquí es que la entrenadora es Goldie Hawn, en esta película dirigida por Michael Ritchie para el lucimiento personal de la actriz, siempre sugerente, atractiva y coqueta, que no ha digerido bien el paso del tiempo.
Una curiosidad es ver a dos actores muy conocidos en uno de sus primeros papeles como miembros del equipo, Wesley Snipes y Woody Harrelson.
No llega al aprobado. Suspenso, 4.