Parece mentira, pero habrá gente que no conozca El Planeta del Tesoro, ya que Disney no le dio la publicidad que se merecía. Y así terminó, siendo un fracaso en taquilla, aunque unos años más adelante consiguió ser una película de culto, por todos aquellas personas que le dieron una oportunidad. Y QUÉ OPORTUNIDAD.
Es una película sólida con un ritmo de historia que te mantiene enganchado en todo momento. A parte de que la trama inicial te saca tu lado aventurero, también contamos con personajes carismáticos que hacen que la película sea aún más entretenida.
Además, contamos con una animación que ha envejecido de la mejor forma, superando a muchas producciones animadas a día de hoy. Y una banda sonora arrolladora que consigue sacarte más de una lágrima, al más puro estilo de Tarzán.
Y, como sucede en Atlantis, tenemos giros de guion que lo vas prediciendo poco a poco, según vamos viendo el desarrollo de la misma. Algo malo si quieres sorprenderte en un futuro no tan lejano, pero en este caso lo dejaría como bueno, ¿no?. Estamos hablando de El Planeta del Tesoro… está todo permitido.
Y por último, el final,... para nada sorprendente. Era lo que el espectador buscaba, un final feliz para todos o “para casi todos”, así que, aunque sea algo típico, relájate y disfruta de esta maravilla audiovisual.