Tercera entrega de la trilogía sobre Batman que enmarca la obra magistral de Nolan, desenlace a la altura de sus precedentes y que no desentona para nada en este Batman moderno que pelea contra la corrupción, los desequilibrios sociales, la mala praxis y la injusticia.
Dejo los análisis técnicos para los cinéfilos, para los legos en la producción cinematográfica baste decir que es un placer pagar una entrada para ver esta trilogía, que con el paso del tiempo será considerado todo un clásico a la altura del Señor de los Anillos.
Mi valoración de la película es de sobresaliente, 9, y de la trilogía un 10, una matrícula de honor más que merecida a un director al que hay que seguir obra por obra, porque seguramente nos regalará nuevas joyas que se quedarán impregnadas en la retina y en la memoria.
Sin duda, una de las mejores trilogías del caballero oscuro y del director que con esta trilogía se encumbra en lo más alto del podio.
La predecesora a esta es una obra magistral, pero esta tiene mucho sentimiento y mucho de lo que es Batman.