Que esta película se llevara el prestigio de ser icónica del cine de terror de los 90 no es casualidad. Es una gozada para los cinéfilos por sus múltiples honores al séptimo arte y por cómo consiguieron rescatar un género sobreexplotado, el slasher. Si la has visto ya puedes hacer como yo, y volver a verla, y si no, sí o sí DEBES verla. Una maravilla.