Excelente remake de una película de los años 60 protagonizada por Sinatra y su trouppe.
Una obra maestra en su género, con un guión profundo y brillante que lleva hasta el resultado apetecido por Ocean (George Clooney), tanto en el nivel crematístico como en el personal.
Plan sugerente y sumamente inteligente para robar tres casinos de Las Vegas propiedad del nuevo novio (Andy García) de la exmujer de Clooney (Julia Roberts), plan que no nos es desvelado hasta los instantes finales del film. Para ello nos van presentando el reclutamiento de los once integrantes de la banda, cada uno un maestro en su género, donde destacan por méritos propios Matt Damon y sobre todo un hambriento Brad Pitt, que dirige magistralmente el plan hasta la consecución del objetivo, mostrándonoslo sólo con retazos para mantenernos en nuestras butacas viendo su ejecución pero sin saber nunca su resultado, si fracasará o tendrán éxito.
Todo ello aderezado con una extraordinaria dirección de la pléyade de actores, reparto auténticamente de lujo, un guión inteligente y sugerente, el glamour de Las Vegas, la sala de juegos de EEUU y una transcendental y brillante banda sonora original, (escuchen el final de la película y la sensación de satisfacción y alivio de los once), que acompaña durante las casi dos horas de metraje para otorgarle una matrícula de honor a esta película y reservarle el sitio que se merece entre mis favoritas.