Indefinición absoluta, tal y como empezó la serie, la cancelaron. No llegó nunca a ser "Mentes criminales", ya que el protagonismo siempre lo tuvo Forrest Whitaker en su papel de agente Cooper, mientras que el resto del equipo, a pesar de la presencia de Penélope García como aliciente, no eran más que meros acompañantes, sin protagonismo alguno.
Estudiada sobreactuación de Forrest Whitaker en todos y cada uno de los capítulos, con un Cooper al que sus propios demonios, los que quieran que fuesen, le torturaban fuera cual fuera el caso a resolver, con incomprensibles cabreos y dejaciones absurdas.
A pesar de todo, a pesar de su inopinada cancelación a la vista del "...To be continued..." del último capítulo, nos deja media docena de buenos capítulos, por lo que no puedo ponerle un suspenso.
Un 6.