Es una película bastante interesante sobre los entresijos de la manipulación y el deseo de poder. Sin embargo, creo que la película ha ido más rápido de lo que yo esperaba, por lo que se me ha quedado a medias, en cierto sentido. Me hubiera gustado ver en más profundidad la relación de los hermanastros y conocer un poco más, si aún cabe, el juego que se traen entre manos. A pesar de ello, he de decir que la escena final es apoteósica, muy buena. Sarah Michelle está espectacular.