Nuevamente los escandinavos dando lecciones a Hollywood y los yankis de como se realizan y producen thrillers de acción e investigación con tramas suculentas y con diversas posibilidades a lo largo de la veintena de capítulos. Embocado en la atmósfera fría y húmeda de los países escandinavos se lleva a cabo la investigación del asesinato de una joven. Se entremezclan las elecciones al Ayuntamiento de Copenhague, donde varios de sus políticos se relacionan en mayor o menor medida con la investigación, así como los sentimientos de la familia de la víctima y de los policías que investigan el asesinato, realizando un informe psicológico de cada uno de ellos y llevando la trama a extremos insospechados donde se te ocurren una docena de culpables. Muy buena en todo, excepto quizás en su resolución, que sigue dejando algunas dudas por resolver. Extraordinario thriller que se merece un 9 y me recomendación para verlo. Y sólo es la primera parte de tres.
En la segunda temporada, lógicamente, el asesino sólo podía ser el más inesperado tras la pléyade de candidatos que nos van exponiendo a lo largo de la serie. La trama política, con el Primer Ministro a la cabeza y con la hipocresía que caracteriza a la clase política para ocultar a la opinión pública sus crímenes de estados, con el ultra derechista Partido del Pueblo intentando recortar las libertades de los musulmanes para desviar la atención, dado el avance inaudito de los partidos radicales de derecha en el norte de Europa, y el ejército desplegado en Afganistán con sus corruptelas propias de los militares apoyados por miembros militaristas del Gobierno dan fuelle a este gran thriller. La policía que encabeza las investigaciones en ambas temporadas, dejando a un lado su vida personal para vivir obsesionada en la investigación, es uno de los grandes encantos de esta serie.Mi valoración, sobresaliente, 9.
Esta tercera temporada va por los mismos derroteros de las anteriores, con el trasfondo político siempre como centro de las investigaciones. Parece que a los daneses gustan de que su sistema político siempre esté de actualidad y en tela de juicio en sus series criminales, así como sus políticos y las influencias de los lobbyes. En el marco de una elecciones, se produce el secuestro de la hija del máximo accionista de una multinacional danesa, además de múltiples asesinatos relacionados con la declaración de suicidio de una menor. Sara nuevamente se hará cargo de las investigaciones, aunque siempre tuvo más afinidad con los muertos que con los vivos y así le iba la vida. Gran serie, de matricula de honor,10. Siempre los norteamericanos remedan lo que otros han hecho de forma exitosa, en esta ocasión, la americana no le llega a la suela de los zapatos a la danesa.
Una serie que hay que ver. Buen guión e interesantes personajes. Si no repitiera hasta el exceso algunos puntos, sería perfecta. Hay que seguirla