Una mujer despechada y herida por el abandono de su marido dejándola con cuatro hijas adolescentes es el germen de esta película excelentemente dirigida por Mike Bender. Una extraordinaria actriz como Joan Allen da vida a esa madre rota por el dolor y el sentimiento de culpa e impotencia, mientras sus hijas a la vista de la situación también toman su postura sobre el cariño o el odio al padre que las dejó abandonadas. Mucha ira y mucho resentimiento.
Mientras, siguen con las rutinas de sus vidas, con sus alegrías y sus decepciones, con sus sonrisas y con sus lágrimas. Kevin Costner realiza otra gran papel como ese gran actor que es, aunque esté muy poco reconocido por la crítica, no así para el gran público.
Drama excelentemente rodado, como la vida misma, con sorpresa incluida. Interesante, 6.