Nueva secuela televisiva para la que enrolaron al mismo director y al superviviente de toda la saga Ernest Borgnine, un actor sin duda entrañable.
Savalas nuevamente elige a sus doce presidiarios, aunque en esta ocasión y ante la baja de uno de ellos ficha a una atractiva teniente, lo que señala lo agotado ya del producto. Señalar también a un joven Ernie Hudson, el alcaide de la prisión de "Oz", que es de los pocos secundarios que hizo carrera.
El guión cortito nuevamente, en esta ocasión son una docena de altos mandatarios nazis de los que saldrá el sucesor de Hitler que viajan en un tren con rumbo a Turquía y a los que deben interceptar los patibularios.
Correctas las escenas de acción con Lee H. Katzin nuevamente al timón y un Telly Savalas al que acompaña su hermano de la serie Kojak, cada vez más orondo y pesado, con una alarmante falta de movilidad para dirigir al grupo en una misión suicida.
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Nueva secuela televisiva para la que enrolaron al mismo director y al superviviente de toda la saga Ernest Borgnine, un actor sin duda entrañable.
Savalas nuevamente elige a sus doce presidiarios, aunque en esta ocasión y ante la baja de uno de ellos ficha a una atractiva teniente, lo que señala lo agotado ya del producto. Señalar también a un joven Ernie Hudson, el alcaide de la prisión de "Oz", que es de los pocos secundarios que hizo carrera.
El guión cortito nuevamente, en esta ocasión son una docena de altos mandatarios nazis de los que saldrá el sucesor de Hitler que viajan en un tren con rumbo a Turquía y a los que deben interceptar los patibularios.
Correctas las escenas de acción con Lee H. Katzin nuevamente al timón y un Telly Savalas al que acompaña su hermano de la serie Kojak, cada vez más orondo y pesado, con una alarmante falta de movilidad para dirigir al grupo en una misión suicida.
Insuficiente, 4.