Crítica

Transparent es una serie de una belleza y profundidad enormes. Los personajes en un inicio son desagradables porque son egoístas, narcisistas... pero cada uno tiene su lucha y va entendiéndose a sí mismo en cada temporada un poquito más. Es por lo tanto, una serie en la que los personajes evolucionan y eso la hace más interesante. Además, plantea un montón de temas de género de manera casi didáctica y eso es un plus, aunque para mí lo más bonito de la serie es que "es algo más". No es una chorrada superficial, en ocasiones es densa, en ocasiones es dura, en ocasiones es bonita y tierna. Al ver los dos primeros capítulos me recordó a a dos metros bajo tierra y claro, es la misma directora. Ciertamente, tiene elementos comunes. Una familia caos que en fondo está muy unida, personajes neuróticos, personajes que están en viajes internos profundos. Está llena de vida y por eso, llena de contradicciones. Además, de Maura en concreto te enamoras porque está por fin a gusto consigo misma y está en fase de escucha, de empatía, casi espiritual diría y así, inspira a todo el mundo a su alrededor. Creo que es una serie de 10 y sin duda la recomiendo.