Siempre temo ver películas de perros porque suelen ser dramas tristes que me hacen llorar. Esta película, aunque con momentos divertidos y un buen mensaje sobre la vida, igualmente me hizo llorar al final. Supongo que soy muy sensible con los perros. Si compartes mi amor por los animales, te gustará; mi recomendación es verla a solas para llorar a gusto.