Tiene un enfoque diferente a otras películas que he visto, cosa que me deja con un sabor un tanto agridulce.
Por una parte, me parece que tiene ciertos momentos en los que es sublime, ya que aborda algunas escenas que son muy duras de digerir y que, desgraciadamente, muchas allegados sufren. Sin embargo, también hay otras escenas que se me hacen realmente incómodas de ver (no por ser explícitas ni nada por el estilo, si no porque veo que son totalmente innecesarias). ¡Kieran Culkin destaca por encima de Jesse Eisenberg sin lugar a dudas!