Viendo el “gran producto” que nos está trayendo Disney estos últimos años, no daba mucho por “Ron da Error”. Sin embargo, para mi sorpresa, la película ha superado todas mis expectativas, llegando a emocionarme en algunos momentos.
El comienzo de “Ron da Error” no es muy llamativo e incluso, es el mismo comienzo de otras tantas películas que tiene Disney o cualquier productora de Hollywood. Pero, una vez que empieza a coger ritmo, nos damos cuenta de que es una crítica a las grandes compañías como Apple. Sí, solo hay que ver al personaje con gafas… de la forma que va vestido.
Todo ello sumado a que la historia principal es la de un chico que no puede adaptarse a la “nueva sociedad” y termina por no encajar en ningún lado… por lo que más de uno se puede sentir identificado.
Una película familiar que habla sobre la amistad con buen ritmo y una animación que expresa más que “Wish: el poder de los deseos”, siendo esta última estrenada en la gran pantalla.
Lo siento mucho, pero a mí esta película, más que enseñar los problemas y las consecuencias del abuso tecnológico, parece una especie de propaganda infantil que destruye los valores humanos.
Entiendo que en el futuro la integración de la tecnología en la sociedad es inevitable, pero de allí a que me muestres que un robot vale más que tus propios lazos humanos, creo que vamos por mal camino.
Si el objetivo era normalizar el uso de la tecnología, no lo ha logrado. Porque esta película solo transmite la necesidad y la dependencia tecnológica para, básicamente, vivir y ser feliz.