El anime en su comienzo parece prometedor, pero según van avanzando los capítulos las sospechas se confirman y si, es un muy buen anime, capitulos muy intensos, sin relleno, con finales espeluznantes y personajes a los que se les coge cariño. La trama que nos cuenta hace que nos enganchemos con suma facilidad, pues el cariño que se demuestran Saturo y Kayo y el afán de salvarla que muestra el protagonista hace que te sumerjas de lleno en el ambiente e incluso llegues a vivir angustia en algunos momentos del anime.
Durante muchos momentos nos van enfocando personajes desde diferentes puntos de vista, la madre al principio planteada como un demonio acaba convirtiéndose en un personaje crucial y con el que quedaremos encandilados en sus momentos de ternura o en las intervenciones estelares que tiene. En todos los capítulos vemos como desconfiamos de un personaje diferente pues habrá actitudes o posesiones que harán que desconfiemos de ellos. Tendremos numerosas sospechas según vaya avanzando la trama pero hasta que no esté apunto de finalizar no sabremos con certeza quien es el culpable.
El anime, por otra parte, muestra un lado muy humano por parte de Saturo queriendo ayudar a Kayo, recordemos era maltratada por su madre y que nuestro protagonista buscó las artimañas necesarias para alejarla de su infierno personal y reanudar una nueva vida. Se puede apreciar momentos muy emotivos, donde vemos como nuestra chica llora de emoción por cosas muy simples y a las que Satoru no le da importancia (para uno de los momentos culmen cuando empieza a llorar por el desayuno y vemos los flashbacks de los anteriores).
En definitiva bajo mi valoración es un anime muy bueno y que me ha dejado muy encandilado desde el inicio hasta su más que correcto final. 9/10
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El anime en su comienzo parece prometedor, pero según van avanzando los capítulos las sospechas se confirman y si, es un muy buen anime, capitulos muy intensos, sin relleno, con finales espeluznantes y personajes a los que se les coge cariño. La trama que nos cuenta hace que nos enganchemos con suma facilidad, pues el cariño que se demuestran Saturo y Kayo y el afán de salvarla que muestra el protagonista hace que te sumerjas de lleno en el ambiente e incluso llegues a vivir angustia en algunos momentos del anime.
Durante muchos momentos nos van enfocando personajes desde diferentes puntos de vista, la madre al principio planteada como un demonio acaba convirtiéndose en un personaje crucial y con el que quedaremos encandilados en sus momentos de ternura o en las intervenciones estelares que tiene. En todos los capítulos vemos como desconfiamos de un personaje diferente pues habrá actitudes o posesiones que harán que desconfiemos de ellos. Tendremos numerosas sospechas según vaya avanzando la trama pero hasta que no esté apunto de finalizar no sabremos con certeza quien es el culpable.
El anime, por otra parte, muestra un lado muy humano por parte de Saturo queriendo ayudar a Kayo, recordemos era maltratada por su madre y que nuestro protagonista buscó las artimañas necesarias para alejarla de su infierno personal y reanudar una nueva vida. Se puede apreciar momentos muy emotivos, donde vemos como nuestra chica llora de emoción por cosas muy simples y a las que Satoru no le da importancia (para uno de los momentos culmen cuando empieza a llorar por el desayuno y vemos los flashbacks de los anteriores).
En definitiva bajo mi valoración es un anime muy bueno y que me ha dejado muy encandilado desde el inicio hasta su más que correcto final. 9/10