Vuelve el Departamento Q al completo, y esta vez en lugar de que ellos elijan el caso por resolver, automáticamente les asignan el caso de un mensaje que aparece en una botella tras estar más de siete años a la deriva. Tras descifrarlo se meten en una vorágine de acontecimientos relacionados con las sectas y la religión, sobre lo divino y sobre lo humano, con una sucesión de desapariciones de menores de casi improbable resolución.
Nuevamente los protagonistas se encuentran en un mundo de depravación y crueldad, mientras tratan de esclarecer un caso del pasado y uno del presente que se entremezclan, buscando la clave para rescatar a dos hermanos ya que el autor parece el mismo y sigue el mismo modus operandi que llevaba a cabo hace más de un lustro, en un ambiente más húmedo y más oscuro si cabe que los anteriores.
Notable, 8.
Me ha gustado, le doy tan baja puntuación porque es muy distinta a la novela que recientemente he leído, me pregunto porque no hacen las películas basadas en novelas fidedignas y se atañen a todo que sea igual. De todos modos a pesar de que todo es un cambio buena película
tercera película de la saga. Los actores cada vez más metidos en sus personajes. estupendas reflexiones sobre la fe. Una interesante película